ANATOMÍAS POSIBLES, Bienal NÓmade- Diagnóstico Terminal (Segunda Parte): GIGANTES Y DERIVAS, curated by Victor Hugo Bravo and Hernan Pacurucú, Antiguo Hospital del IESS/University of Cuenca, Cuenca - Ecuador.
Es un proyecto basado en la operación de traer a la ex-sala de cuidados intensivos de este antiguo hospital, el imaginario de un museo universitario de anatomía en Argentina, mediante intervenciones y piezas elaboradas in situ con objetos encontrados, fotografías y material quirúrgico de uso ginecológico. Las luces intermitentes de la sala; el infinito polvo a remover; las historias sobre espíritus circundantes; las manchas de humedad y óxido; las camillas apiladas y la lectura de vieja documentación, son sólo algunas de las experiencias que me llevaron a pensar la sala no sólo como un lugar abandonado, antes asignado al control y a la administración de cuerpos, sino como un receptáculo de conocimientos aún en tela de juicio. De hecho entre los papeles desparramados en pasillos y habitaciones del nosocomio, había manuales y protocolos de diagnósticos de sangre e insumos. La mayoría de ellos de origen alemán y con instrucciones traducidas al castellano, cuestión que demuestra la persistencia de un paradigma etnocéntrico, y la necesidad urgente de un conocimiento situado. Detenerme en el ejercicio de objetualización, realizado por el facultativo al nomenclar y clasificar al sujeto en nombre de la ciencia y sus metodologías, resulta un punto de inflexión que torna permeables los espacios del hospital y el museo de anatomía.
POSSIBLE ANATOMIES is a project based in bringing back the imaginary of a university museum of anatomy to the ex-intensive care room of this old hospital, by interventions and pieces made in situ with found objects, photographs and chirurgical gynaecological material. Blinking lights inside the room, infinite dust to be removed, ghosts stories, moisture and rust stains, strerchers and old documentation readings are just a few of the experiences that led me to think this room not only as an abandoned place, once assigned to body control and administration, but also as a receptacle for knowledge still to be judged. In fact, among scattered papers along this hospital halls and rooms, some manuals, blood protocols and supplies were found. Most of them were German with instructions translated to Spanish. This demonstrates the persistence of an ethnocentric paradigm and the urgent need for a situated knowledge.
Stopping at this exercise of objectifying, practiced by the professional when naming and classifying someone in the name of science and its methodologies, proofs it as a point of inflection that turns the hospital and the anatomy museum into permeable spaces.